Este sábado 11 de febrero se celebra el Día de la Mujer en la Ciencia. Con este motivo, IMDEA Materiales quiere dar a conocer durante estos días el trabajo de tres de nuestras investigadoras. En este primer artículo de tres, hablamos con la investigadora predoctoral Elena Sánchez.
En su labor diaria como investigadora predoctoral en IMDEA Materiales, Elena Sánchez trabaja en el desarrollo de baterías de iones de litio de nueva generación.
Estas baterías se consideran una pieza fundamental en la descarbonización de los sectores del transporte y la energía, y en la creación de un mundo más sostenible.
Pero aparte de este importante trabajo, Sánchez dedica su tiempo a una causa quizá igual de significativa para influir en la sociedad.
Fuera de IMDEA Materiales, la investigadora de 28 años es la presidenta de la asociación Madrid UCM Student Chapter, un grupo de estudiantes y antiguos alumnos de la universidad dedicados a la divulgación científica.
Para ello, la asociación organiza conferencias dedicadas a la comunicación para investigadores, así como talleres y charlas sobre diferentes temas.
Además, cada año, la asociación organiza el concurso Brain Wars: the future is in your hands. Invitan a estudiantes de último curso de grado, máster o doctorado, o incluso a investigadores que ya hayan defendido su tesis en el último año, a presentar un trabajo de investigación de forma divulgativa ante un jurado cualificado.
Todo ello con el objetivo tanto de fomentar la investigación y la difusión del conocimiento entre los jóvenes investigadores, como de promover el interés por la ciencia y la tecnología entre el público en general.
«Creo que es importante promover la ciencia de esta manera, para que la gente no caiga en trampas y engaños», explica Sánchez. «Cosas tan simples como que la tierra es plana, o todo eso durante la pandemia con las mascarillas o que el COVID-19 se propaga por el 5G, por poner algunos ejemplos».
«Por eso creo que la ciencia tiene que llegar a considerarse cultura general. Con un poco de conocimiento científico sobre ciertos temas, mucha gente podría evitar ese tipo de estafas.»
Los talleres de comunicación científica del Student Chapter han contado incluso con notables en el campo como el Dr. Manuel Seara Valero, biólogo y presentador de A hombros de gigantes en RTVE.
Y Sánchez ha señalado a comunicadores como la científica e influencer en Instagram, Tamara Pazos, como el canal de YouTube Ciencia con Carmen, como ejemplos de cómo comunicar ciencia de forma atractiva a las nuevas generaciones.
«Creo que a los científicos en general, nos cuesta transmitir la ciencia de forma que llegue a la sociedad mientras que otras disciplinas sí lo han conseguido», afirma Sánchez.
«Siento que, en mi propia casa, por ejemplo, me cuesta mucho decirles a mis padres, que no tienen esos mismos conocimientos de electroquímica, lo que hago de una manera sencilla».
Lo que está haciendo Sánchez ahora mismo es trabajar en el desarrollo de baterías de iones de litio de estado sólido, más concretamente, estudiando y aplicando cómo se pueden integrar nanohilos de silicio para los ánodos.
Desarrolla esta actividad dentro del grupo de investigación de Nanocompuestos Multifuncionales del Dr. Juan José Vilatela.
El silicio tiene una capacidad de almacenamiento mucho mayor que el grafito, que es uno de los materiales más utilizados como electrodo negativo en las baterías de iones de litio para teléfonos móviles, coches, etc. por su gran capacidad de almacenamiento de energía.”
Sin embargo, presenta un gran inconveniente, y es que los ánodos de silicio experimentan una expansión volumétrica o hinchazón durante los procesos de carga y descarga de la batería.
«El silicio tiene una alta capacidad energética, pero, tiene sus problemillas,» afirma Sánchez. «Principalmente, la expansión volumétrica que puede generar fracturas durante el uso de la batería, y, por tanto, que la batería deje de funcionar».
«Este es el principal impedimento para la comercialización de este tipo de baterías. Sin embargo, usando el silicio en forma de nanohilos y un electrolito sólido, en lugar de uno líquido, podemos solucionar estos problemas o minimizarlos.»
El desarrollo de esta tecnología podría dar lugar a futuras baterías más seguras, de carga más rápida y de mayor capacidad.