La Dra. Francisca Martínez-Hergueta ha destacado el entorno positivo de trabajo e investigación que ofrece el Instituto IMDEA Materiales como una de sus características más atractivas para los investigadores actuales y futuros.
Martínez-Hergueta pasó cinco años en el IMDEA Materiales, de 2011 a 2015, donde completó su doctorado en Ingeniería de Estructuras, Cimientos y Materiales supervisado por el Dr. Carlos González y el Prof. Javier Llorca.
Desde entonces, ha trabajado como investigadora postdoctoral en la Universidad de Oxford y actualmente es profesora de Dinámica Impulsiva en la Escuela de Ingeniería de la Universidad de Edimburgo.
Al recordar su estancia en IMDEA Materiales como investigadora predoctoral, Martínez-Hergueta señaló el ambiente de compañerismo y apoyo del instituto como uno de los principales atractivos para estudiantes e investigadores.
«Si los estudiantes de doctorado no tienen un entorno adecuado para trabajar, tienden a ser bastante competitivos y esa es una fórmula para el desastre», dijo.
«Los estudios han demostrado que un tercio de los estudiantes de doctorado, y también muchos académicos, sufren problemas de salud mental. Sin embargo, durante mi estancia en el IMDEA, Carlos consiguió que todo saliera bien y se creara un entorno realmente saludable para los investigadores. Creo que eso debería ser una prioridad en cualquier organización académica o de investigación».
A pesar de que ya han pasado siete años desde su paso por IMDEA Materiales, Martínez-Hergueta sigue colaborando estrechamente con sus antiguos compañeros.
Su artículo más reciente, Ballistic response of needlepunched nonwovens, que se publicó en el libro Mechanics of Fibrous Networks del año pasado, fue escrito conjuntamente con González y Llorca.
«Todavía sigo trabajando con ellos», dijo Martínez-Hergueta. «Son mis mentores y, aunque han pasado bastantes años, me siguen ayudando mucho». Cada vez que tengo una propuesta importante, siempre están encantados de revisarla y darme el apoyo que necesito, así que estoy muy agradecida por ello».
A diferencia de su etapa en IMDEA Materiales, en la que se dedicaba casi por completo a la investigación, el puesto actual de Martínez-Hergueta añade a la ecuación los elementos adicionales de la enseñanza y el trabajo administrativo.
Sin embargo, aunque calcula que alrededor del 60% de su tiempo se dedica ahora a esas dos áreas, eso no ha impedido que Martínez-Hergueta siga investigando en nuevos materiales compuestos.
Dos de sus líneas de investigación actuales giran en torno a los materiales compuestos con un mejor rendimiento en impactos balísticos para la industria aeroespacial, y a los materiales compuestos de bajo coste para el sector del automóvil.
«El sector de la automoción no dispone de los mismos recursos para dedicar a la I+D que el sector aeroespacial, por lo que, a menos que podamos producir materiales compuestos que sean rentables en comparación con sus alternativas metálicas tradicionales, no van a ser una opción viable», afirma.
«Esto es especialmente importante en la próxima generación de vehículos eléctricos, ya que uno de los mayores problemas a los que se enfrentan estos vehículos es que las baterías que utilizan son extremadamente pesadas. Eso significa que tenemos que intentar reducir el peso del resto de los componentes para rebajar el peso total del vehículo».
Curiosamente, como parte de su función en la Universidad de Edimburgo, Martínez-Hergueta también ha asumido la tarea de asesorar a la próxima generación de científicos espaciales del Reino Unido como asesora de estudiantes del equipo de cohetes Endeavour.
«Mi experiencia se centra en los materiales y los sistemas mecánicos, por lo que reviso sus diseños y les ayudo en el diseño y las pruebas», explica.
«De hecho, el año pasado ganamos un concurso en el Reino Unido con un satélite del tamaño de una lata que se utilizaba para medir las emisiones de CO2 en los campos de vacas. Hay muchas vacas en Escocia, así que es un campo de investigación bastante importante», añadió riendo.
Y en cuanto a los consejos para otras personas que se planteen seguir su ejemplo y realizar un doctorado, Martínez-Hergueta no duda de que merecerá la pena el esfuerzo.
«Hacer un doctorado, en general, es una forma estupenda de mejorar tus perspectivas profesionales porque te da un conjunto de habilidades único», dijo. «Hay que ser ingenioso, tener paciencia y también estar concentrado. Los tres o cuatro años que pasas haciendo un doctorado te dan definitivamente esas habilidades».
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Puede encontrar una transcripción de nuestra entrevista completa con la Dra. Francisca Martínez-Hergueta aquí: https://materiales.imdea.org/francisca-martinez-hergueta/